Las dos caras que tienen los asilos para ancianos

Cada frunce en el rostro que uno puede observar en una persona representa una historia vivida. La vejez es la etapa que llega a nuestra vida donde en el transcurso del tiempo adquirimos conocimientos.

La vejez representa sabiduría y enseñanza para todo aquel que aprecie y valore a su ser querido de tercera edad.

Hoy, el adulto mayor necesita el cuidado y la atención debida por parte de sus familiares para que tengan un buen estado físico y emocional.

¿Qué son los asilos de ancianos?

Los asilos han sido implantados para poder brindar una calidad de servicio de su seguridad y atención a cada paciente que se interna dentro de la institución.

Este establecimiento de cuidados especializados para personas que no necesitan estar en un hospital pero sin embargo ya no pueden ser cuidados en su propio hogar.

Estos centros, solo se deberán considerar en los siguientes casos, cuando las condiciones familiares no satisfacen las necesidades que requiere la vejez. Y su misión es procurar una vida digna y cuidados especiales para quienes  lo necesitan y salvo cuando su estado mental lo impide, un adulto mayor solo puede ingresar si da su consentimiento.

Los motivos comunes por las cuales se ingresan a un asilo, se da por necesidad de compañía, por motivos de salud (deterioro de salud, disminución de autonomía personal), por no poder valerse por sí mismo(a) y en muchos casos  para no molestar a la familia.

  Tipos de Asilos

 Como un hospital: Este tipo de asilo de ancianos está organizado como un hospital. Los miembros  del personal brindan  asistencia  médica, así como terapia física, del habla y ocupacional. 

 Como un hogar de familia: Estos establecimientos funcionan como un hogar de familia y las rutinas diarias no están fijadas

 Como una combinación de ambos: Algunos asilos de ancianos combinan las unidades que funcionan como un hospital y aquellas que funcionan como un hogar de familia.

En la capital de Lima se encuentran varios asilos en respectivos distritos como:

• Hospedaje para Mayores Abuelitos Felices - en San Borja y Pueblo Libre 

               Casa de Reposo: ( San Borja - Lima )

• El Roble Residencia Geriátrica 

              Casa de Reposo: ( La Molina - Lima )

• Residencia Geriátrica Días Felices 

              Casa de Reposo: ( Santiago de Surco - Lima )

• Centro Geriátrico Jesús Es Mi Pastor 

              Casa de Reposo: ( San Miguel - Lima )

• Casa de Reposo la Pradera 

              Casa de Reposo: ( Miraflores - Lima )

Observando la otra cara de la moneda sobre los asilos para ancianos, la gran desventaja que tienen es que se reportan muchos casos de familias que mandan a su pariente ascendiente a un asilo.

Tomar como excusa de que los estorbe en sus que hacer es diarios porque simplemente no quieren asumir responsabilidad  de hacerse cargo de él.

Por lo tanto ver a un anciano como una carga o molestia y simplemente no brindarle el afecto que se merece por ser de nuestra propia sangre, para ellos debe ser difícil el no sentir dolor, tristeza y creen que se encuentran en el olvido porque no tiene valor para sus familiares.

Mandar a un asilo a un familiar para librarse de él, es una actitud negativa y poco afectiva que pueda tomar como decisión.

Todas las personas tenemos sentimientos  por lo tanto una persona de tercera edad merece disfrutar y vivir plenamente del calor del hogar y sus parientes que lo rodeen.

El ser internado tras cuatro paredes de un cuarto de un asilo para ancianos solo traería que se sienta con soledad y viva deprimido de que nadie lo visite.

Es increíble a donde uno puede llegar como para dar este trato a un ser querido, muy penoso tomar esta actitud.

Si bien son ciertos los asilos brindan comodidades y atención más detallada a cada internado pero sin olvidar que deben recibir  visitas muy seguidas por parte del pariente y sientan su cariño al ser visitados.

Asilo Señor de los Milagros

El asilo para ancianos “Señor de los Milagros”

Visitamos este centro  de  reposo ubicado en Barranco, al ingresas estaba interesada en  conocer las historias de algunos pacientes que se encuentran en el abandono o que ya no reciben visitas desde hace mucho tiempo.

Los días pasan dentro del asilo “Señor de los Milagros”, ellos en las tardes salen al pateo para tomar aire y estar relajados observando el jardín, para  caminar un poco mientras que otros prefieren jugar cartas o leer el periódico.

Charlando uno con otros como familia, los ancianos llevan una vida relajada pero es conmovedor saber que tras cuatro paredes se encuentra una persona de tercera edad que espera recibir cariño y la visita de sus parientes.

Sara Rodriguez

La Sra. Sara Rodríguez Moran (85), lleva más de 8 años dentro del asilo para ancianos “señor de los milagros”. Tiene 3 hijos que la visitaban regularmente cuando tenía un año dentro del establecimiento, fue muy duro asimilar tener que asimilar la ausencia de sus parientes más cercanos, el no saber si se encuentran bien  y que novedades hay dentro de su hogar.

“Me atiende bien aquí, me gusta pintar y decorar pancartas con mis amigas. Mi esposo falleció hace mucho tiempo recordarlo hace que me ponga triste y me sienta sola ya que mis hijos que quiero mucho dejaron de visitarme yo los comprendo deben estar ocupados trabajando y cuidando de sus hijos, espero que se acuerden de su viejita como solían llamarme y verlos pronto porque los quiero mucho y siempre estarán en mi corazón.” -dijo Sra. Sara Rodríguez, mientras pintaba su pancarta-

Antonio Alejos

El sr. Antonio Gabino Alejos Rivera (87), es una persona mantiene sus buenos ánimos y es alegre, por  las tardes le gusta siempre juega cartas y se distrae con esa actividad.

Sus padres murieron cuando él era adolescente, su único hijo se encuentra en el extranjero y no quiere admitir que lo extraña mucho pero el reflejo de sus ojos delata todo lo contrario. No le gusta mucho hablar sobre su vida y mucho menos recordar nada.

“Hola, espero que salga bien tu reportaje. Bueno llevo un buen tiempo hospedándome en este asilo me siento a gusto con el trato que nos dan y me siento seguro gracias a las comodidades que me brindan siempre se los agradeceré la acogida que me han tenido.

Tengo un hijo no sé qué es de su vida, espero que le vaya bien en todas sus metas y aunque no me encuentro a su lado le deseo que este bien de salud. Razones debe tener para no visitarme el tiempo, el trabajo, su familia pero aquí lo esperaré hasta que Dios me lo permita.” -dijo: Sr. Antonio Gabino Alejos Rivera.

Rosa Orrento

Rosa Virgilia Orrento Suarez (89) es muy gentil, le gusta pasear por el jardín y estar acompañada de sus amistades dentro del asilo.

Tiene 5 hijos, el cual los ama con todo su corazón y les desea siempre lo mejor así no la visiten desde hace algunos años.

“Paso mis días tranquila dentro de este asilo, en algún momento el señor me llevara junto con él. Tengo una bonita familia y aunque no visiten ellos saben que los quiero mucho de seguro el tiempo no les da para poder pasar un día conmigo pero los comprendo y espero que se encuentren bien. Siempre sonrían y que se mantenga unidos”. -dijo: Rosa Virgilia Orrento Suarez -

Escribe Rosario Laynes

Sigue con su entrevista